Martinet

¿No has hecho post  Felicitando el día de la madre?
No
¿Y éso?¿ Pero si hiciste el del día del padre?
Ya, pero es que todavía no tengo el hábito de preparar y programar las entradas, todo lo que escribo es presente, se escribe y publica en vivo y en directo, con el estado emocional correspondiente y el tema y fotos que estén paseando ante mí en esos momentos.
Ahhhhhh

Pues éso, que yo ayer estaba de festival, de festival de colores, ideas originales y explosiones de creatividad... y, sobretodo, de festival de amigos.
Es decir, yo ayer estaba en el Martinet.
Ayer, día de la madre, se celebraba el día especial del Martinet, la escuela de mi hija. Este año ya no asiste, ahora va al Instituto, pero para mí es y será la escuela de Silvana

Al llegar me encontré con una lluvia de arte y buen hacer, como siempre, y con la alegría de reencuentros y buenos amigos.
Aquí os dejo una muestra minimal de momentos y espacios
En las fotos no sale, pero las calles de alrededor del colegio estaban llenas de espacios creativos relacionados con el dibujo y la pintura y, sobretodo, llenas de niños, familias, profes y vecinos del barrio

A los largo de todos estos años amigos y conocidos, algunos con curiosidad, otros con interés y otros con desconfianza me han preguntado ¿Qué tiene de especial el Martinet?
Después de muchos años de aclaraciones pedagóquicas, explicaciones y demás...yo dejé de justificar o intentar aclarar la educación de mi hija. Cada adulto elige dónde y cómo vivir en función de sus posibilidades ( emocionales, mentales, físicas, económicas...) y de cómo quiere ver a sus hijos crecer, pasar la mayoría de sus horas infantiles y de qué herramientas y haceres le da para éso
Yo elegí el Martinet, una escuela maravillosamente imperfecta
La escuela por la que a mi hija se le hacían largos los fines de semana y las vacaciones. Una comunidad de aprendizaje donde hemos estado un montón de años compartiendo miradas, aprendizajes, desafíos...
Y de la que es un placer, una alegría y un orgullo sentirse parte

Sentimentalismos aparte, ayer fué un oásis. Disfrutamos recorriendo los espacios atravesados de arte, viendo a los niños jugar, correr, centrarse en sus pinturas, pedir retratos a los compañeros y alumnos de Bellas Artes, subirse a escaleras y pintar casi en el cielo, mirar a través de marcos y pedir ayuda para treparse a una pared repleta de decenas de ellos de todas formas, materiales y colores para colgar su dibujo... besos, charlas, más besos, saludos... un montón de niños queridos que en un año han crecido muchísimo y bebés recién llegados

Después comimos todos juntos en el parque de al lado de la escuela. El cielo de abrió definitivamente y cada grupo buscó su lugar: sombra o sol, mesas o campo, telas y telas de colores sobre las que se desplegó un sinfín de comidas distintas que cada familia había llevado para compartir

¡Hasta hubo momento siesta! Para los que teníamos los niños ya creciditos, éso sí.

Vamos, una fiesta en toda regla

Así que por este buen motivo yo ayer no felicité el día de la madre

Lo hago ahora ¡Felicidades! ¡Disfruten su maternidad!

Besos, besos, besos