Del Caos al Orden y del Orden al Caos

Días intensos
Desde hace dos semanas apenas he tenido un minuto para sentarme a escribir. Entre sesiones Navideñas, edición de fotos, talleres y varios días el estudio cerrado por gripe general , la organización ha sido " in extremis" . Más aún teniendo en cuenta que era parte del "Desafío " al que me comprometí hace dos domingos. Un desafío propuesto como un juego, ante un chocolate caliente y una amiga , el suyo sigue siendo "Top Secret", el mío consistía en mantener la atención sobre varios aspectos de mi vida que me son dificultosos o a los que tenía que dedicar más mimo y detalle.
Estos son:  el orden y el autocuidado. Conceptos muy amplios los dos y con muchos matices. Pero que en mí se traducen en estrés y desarreglo
Las personas desordenadas somos unas incomprendidas. Mi experiencia es la de estar justificando constantemente mi caos, la lógica invisible de mi desorden y su utilidad: el desorden produce "accidentes", encuentros, inspiraciones que de otra manera hubiera sido improbable que se dieran.
Como dirían los surrealistas :
" Tan hermosos como el encuentro casual de un paraguas y una máquina de coser sobre una mesa de disección"
Pero el desorden tiene un hambre voraz y malsana : se come el tiempo y los papeles importantes. Los papeles los suele devolver, de cualquier manera y cuando ya no los necesitas, pero el tiempo...mmm...y si al "tiempo justo" se le suman imprevistos...mmm
Así que  la situación es esta : Tengo una larga y vieja historia de amor con el caos, a la que me cuesta renunciar, todavía me aporta algo que no sé explicar y que a los demás les cuesta comprender: la sensación de que es un tesoro oculto, un diamante por pulir ¿cómo voy a rechazar esa dura piedra si dentro tiene un tesoro que brilla y da luz?
Esta vieja historia de amor es una historia escondida, ya que está mal vista y en mi trabajo no puedo mantenerla...así que la vivo en la intimidad de mi casa, pero por supuesto de alguna u otra manera afecta mis otras áreas.
De ahí el desafío en dos variantes: orden y autocuidado.
Aquí una muestra histriónica de mi aspecto descuidado por falta de organización y tiempo

A causa de que el desorden se me come el tiempo, lo que dedico a mi aspecto son mínimos cuidados básicos, traducido: no me seco el pelo ( consecuente volúmen y salvajismo) no me maquillo, no plancho ( tiro de vaqueros y camisetas ) no me pinto ni despinto las uñas y como casi siempre voy con el tiempo justo, calzo bambas o botas planas ( es muy incómodo correr con tacones ) y lo peor : digo demasiadas veces a las personas que quiero "ahora no puedo que tengo mucho trabajo " y finalmente , no le dedico tiempo a hacer cosas que me gustan mucho: escribir, bailar y hacer fotos fuera del trabajo de estudio
Así que el desafío " Top Secret " era necesario. Hay viejos y largos amores a los que hay que dejar marchar, porque son como un viento que entra a trompicones y con movimiento inconstante te revuelve el pelo y los papeles... luego no sabes por donde empezar a recomponerte...
Pero, como he dicho, siento que que a la vez es  un tesoro, que también aporta frescura y movimiento ¡ Es tan sano ! ¡ No hay nada que me haga sentir más impotencia que la parálisis y el anquilosamiento !

Estaba en una dicotomía.Así que tomé el reto de prestar atención al orden y detalle a mi arreglo. Fué difícil viajar contra inercia, pero lo fuí consiguiendo. Descubrí que en el orden también pasan cosas y que lo salvaje que tanto me gusta, la inspiración, la magia, el juego y lo entrañable todavía surgen más y mejor cuando les das más espacio, están ahí, en el silencio de ese espacio se oye su latir y uno puede seguir mejor el propio ritmo. Aquí, en este punto, encontré una respuesta : Diferenciar el desorden del caos, caos y desorden NO SON SINÓNIMOS. He aquí mi error hasta ahora: Creer que tenía que luchar contra el caos. NO. Mi reto está en la organización (autoorganización) y en fluir del caos al orden y del orden al caos, sin contraponerlos, ni abandonarlos, sin caer en dualismos.

No he investigado extensamente sobre la Teoría del Caos, pero en lo que he leído he visto reflejadas mis sensaciones respecto a este tema:

- Una parte de la creatividad surge de ése caos ( la creatividad puede surgir de la turbulencia y hay que 

  entrar en terreno de las dudas y la incertidumbre para encontrar verdades)

- En el Caos hay un orden interno (Autoorganización)

- Los errores son oportunidades para autoorganizarse

- Todo elemento tiene su propio reloj interno, nuestro cerebro tiene una multiplicidad de ellos y  somos conscientes solo de algunos . Deberíamos vivir siguiendo más ese rítmo, en contra de lo que normalmente hacemos, que es percibir el tiempo dentro de un conteo lineal de segundos, minutos, horas por el que vivimos esclavizados  y estresados

En estos días estoy leyendo " Loca Sabuduría " de Chögyam Trungpa y escribiendo el Post recordé su concepto de "materialismo espiritual " =  tratar de vivir según lo que a uno le gustaría ser.  Trungpa proponía otro camino : Tratar de vivir según lo que uno es, en un incesante  proceso de profundización.

Para concretar y acabar (continuando con la Teoría del Caos, que pienso investigar estas Fiestas Navideñas y de Chögyam Trungpa) :
- Abandono el dualismo Orden - Caos y el hiper esfuerzo por se ordenada y condenar el Caos : continúo investigando, viviendo en ellos y fluyendo del uno al otro
- Adopto y profundizo el "Autoorganizarme " ( que tembién me permitirá estar presente para la gente que quiero, estar operativa para los demás, peinarme, pintarme las uñas, ponerme tacones, escribir, bailar, hacer más fotos...) y continúo la vieja história de amor con el caos, Im so Sorry , es un diamante en bruto.
Aquí unos autorretratos como muestra de mi aspecto relajado cuando me autoorganizo y me tomo mi tiempo

Pregunta de puente entre Domingo y Lunes : ¿ Y si las histórias de amor que rechazamos porque las catalogamos de "caóticas" =  "dañinas" no lo fueran ? ¿ Y si sólo estuvieran desorganizadas ? ¿ Qué podría suceder si encontráramos una autoorganización a nuestra historia de amor ? ¿Podríamos continuarla de otra manera?

¿Somos capaces de amarnos en este viaje del caos al orden y del orden al caos?

Ahí dejo un reto: Volver  a bailar y bailar y bailar... hasta que encontremos nuestro propio rítmo y podamos construir uno en común

Mientras espero que me toque salir a la pista voy soltando el peso que no quiero, con esta canción de madrugada  Boa Sorte/Good Luck  y estos zapatos por estrenar